En el mundo cada vez más urbanizado en el que vivimos, el paisajismo urbano se ha convertido en una disciplina esencial para crear espacios armoniosos que integren la naturaleza en las ciudades. La arquitectura y la naturaleza se unen en una simbiosis perfecta, donde se busca equilibrar el desarrollo humano con el respeto y la preservación del medio ambiente.
En este artículo exploraremos cómo la arquitectura y la naturaleza se entrelazan en el paisajismo urbano, enfocándonos en las diferentes técnicas utilizadas para lograr esta integración. Desde el diseño de jardines verticales y azoteas verdes, hasta la creación de parques urbanos y la rehabilitación de espacios degradados, descubriremos cómo la arquitectura puede ser una aliada en la creación de entornos sostenibles y enriquecedores para los habitantes de las ciudades.
El paisajismo urbano utiliza elementos naturales y arquitectónicos para crear espacios verdes en las ciudades
El paisajismo urbano es una disciplina que busca integrar la naturaleza y la arquitectura en los espacios urbanos, creando ambientes equilibrados y sostenibles. A través de diferentes elementos, como plantas, árboles, arbustos, fuentes y mobiliario urbano, se logra transformar áreas grises y monótonas en espacios verdes y atractivos.
Esta simbiosis entre la arquitectura y la naturaleza en el paisajismo urbano es esencial para mejorar la calidad de vida de los habitantes de las ciudades. El contacto con la naturaleza tiene numerosos beneficios para la salud física y mental de las personas, y contribuye a crear un entorno más amigable y humano.
Elementos naturales en el paisajismo urbano
El uso de elementos naturales es fundamental en el diseño de espacios verdes en las ciudades. Las plantas y árboles no solo aportan belleza estética, sino que también mejoran la calidad del aire, absorben el ruido y regulan la temperatura.
- Plantas y flores: se utilizan en jardines, parques y plazas para crear ambientes coloridos y agradables. Además, algunas plantas tienen propiedades purificadoras y ayudan a eliminar contaminantes del aire.
- Árboles: además de proporcionar sombra, los árboles absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno, mejorando la calidad del aire y reduciendo la contaminación acústica.
- Agua: las fuentes, cascadas y estanques son elementos que aportan frescura y relajación al paisaje urbano. Además, contribuyen a regular la temperatura y atraen a la fauna local.
Elementos arquitectónicos en el paisajismo urbano
La arquitectura también desempeña un papel clave en el paisajismo urbano, complementando y realzando los elementos naturales. Algunos elementos arquitectónicos utilizados son:
- Senderos y caminos: permiten recorrer y disfrutar de los espacios verdes de manera ordenada y accesible.
- Plazas y miradores: áreas de descanso y encuentro que ofrecen vistas panorámicas de los jardines y parques.
- Iluminación: la iluminación adecuada resalta los elementos naturales y arquitectónicos durante la noche, creando ambientes mágicos y seguros.
- Mobiliario urbano: bancos, mesas, pérgolas y otros elementos proporcionan comodidad a los visitantes y promueven la interacción social.
La combinación de elementos naturales y arquitectónicos en el paisajismo urbano permite crear espacios equilibrados, funcionales y estéticamente agradables. La integración de la naturaleza en las ciudades es esencial para mejorar la calidad de vida de los habitantes y contribuir a la sostenibilidad de los entornos urbanos.
La combinación de la arquitectura y la naturaleza en el paisajismo urbano crea un entorno equilibrado y agradable para los residentes
El paisajismo urbano es una disciplina que busca integrar el diseño arquitectónico con el entorno natural. En las ciudades modernas, donde el espacio verde es limitado, es esencial encontrar formas de incorporar la naturaleza en la arquitectura urbana.
La simbiosis entre la arquitectura y la naturaleza en el paisajismo urbano tiene numerosos beneficios. Por un lado, ayuda a crear un entorno más agradable y estéticamente atractivo para los residentes. La presencia de áreas verdes y elementos naturales como árboles, arbustos y flores, suaviza la dureza de los edificios y crea un ambiente más acogedor.
Además, la naturaleza en el paisajismo urbano también es beneficioso para la salud y el bienestar de las personas. Estudios científicos han demostrado que el contacto con la naturaleza reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y aumenta la productividad. Por lo tanto, incluir espacios verdes en la arquitectura urbana contribuye a mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad.
Existen diferentes formas de integrar la naturaleza en la arquitectura urbana. Una de ellas es a través de los jardines verticales, que consisten en la instalación de plantas en las fachadas de los edificios. Estos jardines no solo añaden belleza estética, sino que también ayudan a purificar el aire y a aislar térmicamente los edificios.
Otra opción es la creación de espacios verdes en los tejados de los edificios. Los techos verdes no solo ofrecen un lugar de recreación para los residentes, sino que también ayudan a reducir el efecto isla de calor y a mejorar la calidad del aire en la ciudad.
Además, se pueden incluir elementos naturales en el diseño arquitectónico, como la utilización de materiales sostenibles y la incorporación de elementos acuáticos, como fuentes o estanques, que aportan frescura y tranquilidad al entorno urbano.
La combinación de la arquitectura y la naturaleza en el paisajismo urbano es esencial para crear un entorno equilibrado y agradable para los residentes. Esta simbiosis no solo mejora la estética de la ciudad, sino que también contribuye al bienestar y la salud de las personas. Por lo tanto, es importante seguir integrando la naturaleza en el diseño arquitectónico de las ciudades.
Los edificios pueden integrarse con el entorno natural a través del uso de materiales y colores que se mezclen con la vegetación circundante
En el paisajismo urbano, la arquitectura y la naturaleza pueden fusionarse de manera armoniosa, creando una simbiosis perfecta que beneficia tanto a los habitantes de la ciudad como al medio ambiente. Una de las formas en que esto se logra es a través del uso de materiales y colores que se integren con la vegetación circundante.
Las áreas verdes en las ciudades proporcionan beneficios ambientales, como la reducción de la contaminación del aire y la regulación de la temperatura
Las áreas verdes en las ciudades desempeñan un papel fundamental en el paisajismo urbano, ya que no solo aportan belleza estética, sino que también proporcionan una serie de beneficios ambientales imprescindibles para el equilibrio de los ecosistemas urbanos.
Uno de los beneficios más destacados es la reducción de la contaminación del aire. Los árboles y las plantas actúan como filtros naturales, absorbiendo gases contaminantes como el dióxido de carbono y liberando oxígeno puro. Además, las áreas verdes ayudan a reducir la concentración de partículas en suspensión, como el polvo y los metales pesados, mejorando así la calidad del aire que respiramos.
Otro beneficio importante es la regulación de la temperatura. Las áreas verdes actúan como auténticos reguladores térmicos, ya que proporcionan sombra y refrescan el ambiente a través de la evaporación del agua de las plantas. Esto es especialmente relevante en las zonas urbanas densamente pobladas, donde el asfalto y el concreto retienen el calor y generan islas de calor. Gracias a las áreas verdes, se puede contrarrestar este efecto y mantener un clima más agradable y saludable.
Además de estos beneficios ambientales, las áreas verdes también contribuyen a la biodiversidad urbana. Al proporcionar un hábitat natural para aves, insectos y otros animales, se fomenta la presencia de diferentes especies en la ciudad. Esto no solo enriquece el entorno, sino que también ayuda a mantener el equilibrio ecológico y a preservar la diversidad biológica.
Las áreas verdes en las ciudades desempeñan un papel fundamental en el paisajismo urbano, ya que proporcionan beneficios ambientales como la reducción de la contaminación del aire, la regulación de la temperatura y la promoción de la biodiversidad. Por tanto, es fundamental apostar por un diseño urbano que integre de forma armónica la arquitectura y la naturaleza, para crear una simbiosis perfecta que beneficie tanto a las personas como al medio ambiente.
El paisajismo urbano puede mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad al proporcionar espacios recreativos y promover la salud y el bienestar
El paisajismo urbano es una disciplina que combina la arquitectura y la naturaleza para crear espacios verdes en entornos urbanos. Esta práctica busca mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad al proporcionar áreas recreativas, promover la salud y el bienestar, y fomentar la conexión con la naturaleza.
En este sentido, la arquitectura y la naturaleza se convierten en una simbiosis perfecta dentro del paisajismo urbano. La arquitectura aporta la estructura y el diseño de los espacios, mientras que la naturaleza aporta la belleza y la vida a través de elementos como plantas, árboles, flores y cuerpos de agua.
Beneficios del paisajismo urbano en la arquitectura y la naturaleza:
- Mejora de la calidad del aire: La vegetación en los espacios urbanos ayuda a filtrar y purificar el aire, reduciendo la contaminación y mejorando la calidad del aire que respiramos.
- Promoción de la salud y el bienestar: Estar en contacto con la naturaleza tiene efectos positivos en nuestra salud mental y física. Los espacios verdes en la ciudad nos brindan un lugar para relajarnos, hacer ejercicio y reducir el estrés.
- Reducción del ruido: Las áreas verdes actúan como barreras naturales que absorben y reducen el ruido del tráfico y otras fuentes de contaminación acústica, creando un entorno más tranquilo y agradable.
- Promoción de la biodiversidad: El paisajismo urbano puede ser un refugio para la flora y fauna local, promoviendo la biodiversidad en entornos urbanos que de otra manera serían dominados por la infraestructura y la construcción.
- Regulación de la temperatura: Los espacios verdes proporcionan sombra y reducen la temperatura ambiente, ayudando a mitigar el efecto de isla de calor en las ciudades.
La combinación de arquitectura y naturaleza en el paisajismo urbano nos brinda una simbiosis perfecta, donde ambos elementos se complementan y potencian mutuamente. Este enfoque no solo mejora la estética de la ciudad, sino que también promueve la salud, el bienestar y la sostenibilidad. Es importante seguir fomentando esta práctica para crear entornos urbanos más agradables y habitables para todos.
La arquitectura y la naturaleza pueden trabajar juntas para crear diseños innovadores que sean estéticamente agradables y funcionales
El paisajismo urbano es una disciplina que busca integrar la naturaleza en el entorno construido de las ciudades. En este sentido, la arquitectura y la naturaleza pueden trabajar juntas para crear diseños innovadores que sean estéticamente agradables y funcionales.
La simbiosis entre la arquitectura y la naturaleza es crucial para lograr un paisajismo urbano exitoso. La arquitectura puede proporcionar el soporte estructural necesario para la incorporación de elementos naturales, como jardines verticales, techos verdes y patios interiores. Estos elementos no solo añaden belleza al entorno, sino que también contribuyen a la sostenibilidad y al bienestar de los habitantes de la ciudad.
Los jardines verticales, una tendencia en el paisajismo urbano
Los jardines verticales son una excelente manera de integrar la naturaleza en la arquitectura de una manera innovadora y eficiente en términos de espacio. Estas estructuras consisten en la colocación de plantas en las fachadas de los edificios, creando así una cascada de vegetación que embellece el entorno urbano.
Además de su atractivo estético, los jardines verticales proporcionan beneficios ambientales significativos. Ayudan a mejorar la calidad del aire, ya que las plantas absorben el dióxido de carbono y liberan oxígeno. También actúan como aislantes térmicos, reduciendo el consumo de energía al mantener las temperaturas más frescas en verano y más cálidas en invierno.
Techos verdes, otra forma de integrar la naturaleza en la arquitectura
Los techos verdes son otra tendencia en el paisajismo urbano que demuestra la perfecta simbiosis entre la arquitectura y la naturaleza. Consisten en la instalación de vegetación en los techos de los edificios, proporcionando múltiples beneficios tanto a nivel estético como medioambiental.
Estos techos verdes ayudan a reducir el impacto ambiental de los edificios al actuar como aislantes térmicos y absorber el agua de lluvia, evitando así la sobrecarga de los sistemas de drenaje. Además, proporcionan un hábitat para insectos y aves, contribuyendo a la biodiversidad urbana.
Patios interiores, espacios de conexión con la naturaleza
Los patios interiores son otro ejemplo de cómo la arquitectura y la naturaleza pueden trabajar juntas en el paisajismo urbano. Estos espacios, ubicados en el interior de los edificios, permiten la creación de pequeños oasis naturales en medio de la ciudad.
Los patios interiores proporcionan un lugar de descanso y relajación para los habitantes de la ciudad, permitiéndoles conectarse con la naturaleza sin necesidad de salir de su entorno construido. Además, mejoran la iluminación natural de los espacios interiores y promueven la ventilación cruzada, contribuyendo así a la eficiencia energética de los edificios.
La arquitectura y la naturaleza pueden trabajar juntas en el paisajismo urbano para crear diseños innovadores y funcionales. Los jardines verticales, los techos verdes y los patios interiores son solo algunas de las formas en que esta simbiosis puede manifestarse, proporcionando beneficios estéticos, ambientales y de bienestar para los habitantes de las ciudades.
El paisajismo urbano puede ser una forma de preservar y proteger la biodiversidad en las ciudades, proporcionando hábitats para plantas y animales
En la actualidad, el paisajismo urbano ha adquirido una gran importancia en el diseño y planificación de las ciudades. No solo se trata de embellecer los espacios públicos, sino de crear un entorno que promueva la sostenibilidad y la preservación de la naturaleza.
Una de las principales características del paisajismo urbano es su capacidad para crear una simbiosis perfecta entre la arquitectura y la naturaleza. A través de la inclusión de elementos naturales como árboles, plantas y cuerpos de agua, se logra integrar la naturaleza en el entorno urbano, generando múltiples beneficios tanto para los habitantes de la ciudad como para el medio ambiente.
Beneficios del paisajismo urbano para la biodiversidad
El paisajismo urbano puede ser una herramienta eficaz para preservar y proteger la biodiversidad en las ciudades. Al incluir especies nativas en el diseño de los espacios verdes, se crea un hábitat propicio para la fauna y la flora local.
Además, la incorporación de corredores verdes y la creación de áreas verdes conectadas entre sí, permiten a las especies desplazarse y reproducirse, evitando la fragmentación de sus hábitats naturales.
Otro beneficio importante del paisajismo urbano es la mejora en la calidad del aire. Las áreas verdes actúan como filtros naturales, absorbiendo gases contaminantes y liberando oxígeno. Esto contribuye a reducir la contaminación atmosférica y mejorar la salud de los habitantes de la ciudad.
Principales técnicas de paisajismo urbano para la preservación de la biodiversidad
Existen diversas técnicas que pueden ser aplicadas en el paisajismo urbano para fomentar la preservación de la biodiversidad:
- Selección de especies nativas: Es fundamental utilizar plantas autóctonas en el diseño de los espacios verdes, ya que son las más adaptadas al clima y las condiciones del entorno.
- Creación de hábitats: Incorporar elementos como estanques, setos y muros verdes, permite crear refugios para la fauna y la flora.
- Uso de técnicas de jardinería sostenible: Evitar el uso de pesticidas y fertilizantes químicos, y optar por técnicas de riego eficientes, contribuye a mantener un equilibrio ecológico en los espacios verdes.
- Implementación de sistemas de drenaje sostenible: La utilización de técnicas como los jardines de lluvia y los tejados verdes, permite reducir el impacto de las precipitaciones en el sistema de drenaje de la ciudad, al tiempo que se crea un hábitat para las especies locales.
El paisajismo urbano es una herramienta clave para promover la preservación de la biodiversidad en las ciudades. A través de la integración de la naturaleza en el diseño y planificación urbana, se puede crear un entorno más saludable y sostenible, donde la arquitectura y la naturaleza se fusionen en perfecta armonía.
La integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico puede ayudar a reducir el impacto ambiental de los edificios, al proporcionar sombra natural y reducir la necesidad de aire acondicionado
En el mundo actual, donde la sostenibilidad y la preservación del medio ambiente se han convertido en prioridades, la arquitectura y el paisajismo urbano juegan un papel fundamental en la reducción del impacto ambiental de los edificios. Una forma efectiva de lograrlo es mediante la integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico, creando una simbiosis perfecta entre la estructura construida y el entorno natural que la rodea.
Una de las formas más populares de lograr esta integración es a través del uso de elementos naturales como árboles, plantas y jardines verticales. Estos elementos no solo embellecen el espacio, sino que también proporcionan sombra natural, reduciendo así la necesidad de aire acondicionado y, por lo tanto, el consumo de energía. Además, las áreas verdes también actúan como filtros naturales al absorber el dióxido de carbono y liberar oxígeno, mejorando así la calidad del aire y creando un ambiente más saludable.
Beneficios de la integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico
La integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico no solo tiene beneficios ambientales, sino también beneficios sociales y económicos. Algunos de los beneficios más destacados son:
- Mejora de la calidad de vida: La presencia de áreas verdes y espacios naturales en entornos urbanos ha demostrado tener un impacto positivo en la salud y el bienestar de las personas. Estos espacios proporcionan un ambiente relajante y estimulan la conexión con la naturaleza, reduciendo el estrés y mejorando la calidad de vida de los habitantes de la ciudad.
- Promoción de la biodiversidad: La integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico también contribuye a la preservación de la biodiversidad urbana. Al proporcionar hábitats naturales para plantas y animales, se fomenta la diversidad de especies y se crea un equilibrio ecológico en el entorno construido.
- Ahorro de energía: Como se mencionó anteriormente, el uso de elementos naturales como árboles y plantas puede ayudar a reducir la necesidad de aire acondicionado, lo que a su vez disminuye el consumo de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Valorización de la propiedad: La presencia de áreas verdes y espacios naturales en un edificio o desarrollo urbano puede aumentar su valor y atractivo para los posibles compradores o inquilinos. Estos espacios proporcionan un ambiente agradable y contribuyen a crear una sensación de comunidad y bienestar entre los residentes.
La integración de la naturaleza en el diseño arquitectónico no solo es estéticamente atractiva, sino que también ofrece múltiples beneficios ambientales, sociales y económicos. Al crear una simbiosis perfecta entre la arquitectura y la naturaleza, podemos construir un futuro más sostenible y armonioso.
El paisajismo urbano puede ayudar a crear comunidades más fuertes y cohesionadas, al proporcionar espacios públicos para que las personas se reúnan y socialicen
El paisajismo urbano es una disciplina que combina la arquitectura y la naturaleza para crear espacios urbanos más agradables y habitables. A través del diseño de parques, plazas y jardines, se busca mejorar la calidad de vida de los habitantes de las ciudades, promoviendo la interacción social y el bienestar emocional.
En el paisajismo urbano, la arquitectura y la naturaleza se complementan y se fusionan en una simbiosis perfecta. Por un lado, la arquitectura aporta la estructura y el orden, creando espacios definidos y funcionales. Por otro lado, la naturaleza aporta la belleza y la vitalidad, creando ambientes orgánicos y llenos de vida.
Beneficios del paisajismo urbano
El paisajismo urbano no solo es estéticamente agradable, sino que también tiene numerosos beneficios para las personas y el entorno. Algunos de ellos son:
- Mejora la calidad del aire: Los espacios verdes actúan como pulmones urbanos, absorbiendo dióxido de carbono y liberando oxígeno. Esto ayuda a reducir la contaminación del aire y a mejorar la calidad del aire que respiramos.
- Promueve la biodiversidad: Los espacios verdes en las ciudades son refugios para la flora y fauna local, contribuyendo a la conservación de la biodiversidad urbana. Además, proporcionan hábitats para aves, insectos y otros animales, creando un equilibrio ecológico en el entorno urbano.
- Fomenta la salud y el bienestar: Estar en contacto con la naturaleza tiene un impacto positivo en nuestra salud y bienestar. Los espacios verdes nos brindan la oportunidad de hacer ejercicio al aire libre, reducir el estrés y mejorar nuestro estado de ánimo.
- Promueve la interacción social: Los espacios públicos bien diseñados fomentan la interacción social entre las personas. Los parques y plazas se convierten en lugares de encuentro y convivencia, donde se pueden realizar actividades en común y fortalecer los lazos comunitarios.
El paisajismo urbano es una herramienta clave para crear comunidades más fuertes y cohesionadas. A través de la combinación de la arquitectura y la naturaleza, se generan espacios públicos que promueven la interacción social, mejoran la calidad de vida y contribuyen a la preservación del medio ambiente. Es fundamental seguir apostando por el paisajismo urbano en el desarrollo de nuestras ciudades, para lograr un equilibrio entre el avance urbano y la conservación de la naturaleza.
La arquitectura y la naturaleza pueden trabajar juntas para crear una identidad única para una ciudad, destacando sus características naturales y culturales
En el mundo moderno, donde la urbanización avanza rápidamente, es cada vez más importante encontrar formas de integrar la naturaleza en el diseño de nuestras ciudades. La arquitectura y el paisajismo urbano pueden ser herramientas poderosas para lograr esta integración, creando espacios que sean tanto funcionales como estéticamente agradables.
El papel de la arquitectura en el paisajismo urbano
La arquitectura juega un papel clave en el paisajismo urbano al crear estructuras que se adaptan al entorno natural y al mismo tiempo lo realzan. Los arquitectos tienen la capacidad de diseñar edificios que se integren armoniosamente con su entorno, ya sea utilizando materiales naturales, incorporando elementos de diseño inspirados en la naturaleza o creando espacios verdes en los tejados o fachadas de los edificios.
- Utilización de materiales naturales: optar por materiales como la madera, la piedra o el vidrio, que se fusionan con el paisaje circundante, ayuda a crear una transición suave entre la arquitectura y la naturaleza.
- Diseño inspirado en la naturaleza: tomar elementos de la naturaleza, como formas orgánicas o patrones encontrados en plantas y animales, puede dar a los edificios una apariencia más fluida y armoniosa.
- Espacios verdes: la incorporación de jardines, terrazas o incluso paredes verdes en los edificios no solo proporciona áreas de recreación para los habitantes de la ciudad, sino que también ayuda a mejorar la calidad del aire y a mantener el equilibrio ecológico.
El poder del paisajismo urbano
El paisajismo urbano es fundamental para crear una conexión directa entre la arquitectura y la naturaleza, ya que se enfoca en el diseño y la planificación de espacios al aire libre. El uso estratégico de elementos naturales como árboles, arbustos, césped y agua puede transformar completamente la apariencia de una ciudad, haciendo que los espacios urbanos sean más agradables para vivir.
- Árboles y arbustos: la plantación de árboles y arbustos en las calles y plazas de la ciudad no solo proporciona sombra y frescura, sino que también ayuda a reducir la contaminación acústica y mejora la calidad del aire.
- Césped y zonas verdes: la creación de áreas verdes en parques, plazas y jardines permite a los habitantes de la ciudad disfrutar de espacios de recreación al aire libre, fomentando un estilo de vida saludable y proporcionando un refugio tranquilo en medio del bullicio urbano.
- Agua: la integración de elementos acuáticos, como fuentes o estanques, no solo añade un elemento estético atractivo, sino que también crea un ambiente relajante y refrescante en la ciudad.
La integración de la naturaleza en el paisajismo urbano es esencial para crear ciudades más sostenibles, saludables y agradables para vivir. La arquitectura y el paisajismo pueden trabajar juntos para lograr esta simbiosis perfecta, creando espacios que sean tanto funcionales como estéticamente atractivos, y al mismo tiempo respetuosos con el medio ambiente. Es importante que los arquitectos y urbanistas consideren cuidadosamente el entorno natural al diseñar edificios y espacios al aire libre, para que nuestras ciudades puedan prosperar en armonía con la naturaleza.
Preguntas frecuentes
1. ¿Qué es el paisajismo urbano?
El paisajismo urbano es la disciplina encargada de diseñar y planificar espacios verdes en entornos urbanos, incorporando elementos naturales en la arquitectura de la ciudad.
2. ¿Cuál es el objetivo del paisajismo urbano?
El objetivo del paisajismo urbano es mejorar la calidad de vida de los habitantes de la ciudad, proporcionando espacios verdes que promuevan la conexión con la naturaleza y contribuyan al bienestar físico y mental.
3. ¿Qué beneficios brinda el paisajismo urbano?
El paisajismo urbano brinda numerosos beneficios, como la reducción de la contaminación acústica y atmosférica, la mejora de la calidad del aire, la regulación de la temperatura, la conservación de la biodiversidad y la promoción de la actividad física al aire libre.
4. ¿Cómo se integra la arquitectura con la naturaleza en el paisajismo urbano?
La arquitectura se integra con la naturaleza en el paisajismo urbano a través de la utilización de materiales sostenibles, la incorporación de sistemas de captación y reutilización del agua, la elección de plantas autóctonas y la creación de espacios verdes que se conecten entre sí, formando corredores naturales en la ciudad.